Hay quien dijo que lo más profundo es la piel. Como sea, la piel es la frontera con el mundo. La superficie de la belleza y el lugar de las heridas. Aunque lo disimule, el ojo también es piel. Una particularmente vulnerable. El exterior/interior se organiza en la mirada. Este espacio tiene que ver con la construcción de un modo de mirar. Una forma de subjetividad a través de un modo de mirar teatro.

lunes, 10 de agosto de 2015

En Cartel: El don

El don, Griselda Gambaro
En un mundo donde lo acariciado es el mal, donde se olvida hasta el nombre del crimen, Márgara predice ante multitudes un futuro sin catástrofes, sin maldad. Un porvenir donde la muerte sea un sueño de sábanas limpias. Entonces, todos juntos podremos salvarnos y ayudar a otros a salvarse.
Visión de caballitos en el cielo. ¿Predicción o deseo? En todo caso, las predicciones para que se cumplan deben ser escuchadas. Esto es lo que propone El don, obra inédita (2013) de Griselda Gambaro, que se estrenó el último sábado en el Teatro Nacional Cervantes. 
La dirección de Silvio Lang, apoyada en un interesantísimo trabajo coreográfico a cargo de Diana Szeinblun, apuesta a un texto multiplicado en el  lenguaje de los cuerpos. Cuerpos estremecidos, sombras de cuerpos en la tormenta.
La realidad desmiente a la desafortunada Casandra que vive en la piel de Cristina Banegas. Ni la Naturaleza responde, la tormenta arrasa las barcas, inmisericorde. El amor tampoco responde, Sonia, su hija, es violentada por su marido. La muerte llega sin sábanas limpias. Entre la violencia o la intemperie, la madre y la hija y una enternecedora canción de cuna. 
¿Creer en la bondad es un delirio de caballitos con penachos de colores?

Ficha técnico artística
Autoría: Griselda Gambaro
Actúan: Cristina Banegas, Belén Blanco, Claudia Cantero, Marcelo Subiotto
Vestuario: Renata Schussheim
Escenografía: Gonzalo Córdova
Iluminación: Gonzalo Córdova
Asistencia de vestuario: Laura Copertino
Asistencia de dirección: Marcelo Mendez
Producción: Yamila Rabinovich
Música original y en vivo: Pablo Cecere
Coreografía: Diana Szeinblum
Dirección: Silvio Lang
Teatro Nacional Cervantes, Temporada 2015.